Hoy me levanté prontito para ir a la biblioteca. Cogí un buen sitio, estudié muy feliz, y de pronto llegó ella. Pfff... Estoy de mal humor desde que llegó. Menudo personaje. Nada mas sentarse comenzó a abanicarse. Vamos a ver, que solo subiste 15 escaleras y ya estás sudando!! El deporte y tu no sois muy amigos, ¿no? Lo siguiente que hizo fue empezar a resoplar. Bueno, en su caso podría decirse que eran bufidos. Supongo que el libro de cálculo que está usando es demasiado duro para ella, así que mejor que deje la carrera, y en especial la biblioteca.
Por supuesto esto no fue solo por la mañana, por la tarde no solo continuó con sus bufidos y abanicamientos, también empezó a suspirar.
Desde aquí le deseo mi mas sincera suerte en sus exámenes, que termine la carrera y que no vuelva a sentarse en mi mesa de estudio, que ya somos muchos y su culo no cabe entre la chica de al lado y yo.
Ahora que tengo que dejar de ir a la playa para ir a la biblioteca, es un buen momento para comenzar un blog de quejas, sobretodo porque estoy rodeado de personajes indeseables...
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
Suscribirse a
Entradas [Atom]