Los llorones
Si hay algo que me fastidia tremendamente son los llorones. Son esas personas que se quejan sin motivo ante una situación en la que cualquier otro daría la cara y no intentaría poner excusas y dar lástima a los demás.
No se dan cuenta de que realmente están en la misma situación que los demás, pero como no ganan se sienten muy perjudicados. Seguramente porque siempre se lo dieron hecho o más fácil que a los demás para lograr el objetivo.
Entre estas gentes, desafortunadamente tenemos muchos ejemplos. Por supuesto todos tenemos amigos que se quejan de las cartas que le entran o de que "las preguntas que me tocan son más difíciles" jugando al trivial.
En los deportes tenemos a los clásicos entrenadores de primera que dicen que su equipo jamás es el favorito, porque "ese equipo de segunda B juega muy organizado y en su campo es imbatible". En esto tenemos al gran llorón Irureta, por antonomasia.
Pero hay un llorón que es espectacular. Siempre llora. Cuando gana es porque es Dios y, sinceramente, no me extraña que lo piense de él mismo porque SIEMPRE tiene un coche malo, poco competitivo y los demás coches son mejores que el suyo. Por supuesto estoy hablando de
Fernando Alonso. Después de hacer McLaren 2º y 3º en Australia, seguían diciendo que tenían un coche muy inferior a los Ferrari. Después de la carrera de hoy (1º y 2º) sigue diciendo que son inferiores.
Lo peor de todo es que cuando les va mucho mejor que a los otros por diversas circunstancias, se sienten muy orgullosos de su trabajo y JAMÁS es porque a los otros les vaya mal, es porque son muy superiores. Odio a los llorones.
Etiquetas: gente